dientes

yo sabía que a vos te gustaba muchísimo dormir atado de pies y manos y por eso podía complacerte
agarrar las cuerdas y hacer unos nudos imposibles de desatar
te exitaba la sensación del cuerpo al quedarse sin sangre en las extremidades
te calentabas y decías palabras impronunciables
yo gustaba de vos, me provocaba una repulsión muy placentera ver tus manos
cada vez más coloradas tocarme las piernas
odiaba todo lo que me hacías y te adoraba por mirarme con los ojos bien redondos,
atónito y apenas empezabas a gritarme que te desate, lloraba calladita
(siempre me gustó hacerme la víctima).